Las sorpresas de estos días no me están gustando mucho.
Se que el Diablo me reclama lo que dije que era suyo.
Si el camino es largo y duro no me importa andar a pata,
solo quiero llevar siempre un buen par de alpargatas.
Con o sin vos, estoy de tu lado.
Y si el destino ya esta escrito, el peligro es la postdata.
Habrá que aprender a afrontar la vida con machetes y serruchos,
con navajas afiladas esperando su buen uso.
A guardarnos una trampa aunque no nos de orgullo.
Y que los ases en la manga no sean justo el culo sucio...
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3 comentarios:
Me ha sacado una sonrisa, no se lo voy a negar.
Y aunque lo que cuenta no es para el chiste,
es la pura realidad.
Qué le vamos a hacer con esta vida
mal arreada y con infinitos defectos
y nosotros en el medio como insectos
nos queda siempre a mano una salida
barajar otra vez, pedir un mazo nuevo
y en la arremetida de corajudo
plantar bandera, mirar bien señudo
y evitar terminar de cara al suelo.
Me lo imagino al ritmo de una linda guitarra.
Creo, si no me falla la memoria,
una vez pasé por aquí, y casualmente también se lo nombraba al diablo...
curioso.
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