Noche buena en pleno invierno

Después de esa siesta tan larga para un sábado , comenzó a prepararse para ir a lo de Gobi (Así lo apodaban a Pablo , por sus raras estrategias en el juego TEG). Ya eran las diez de la noche , y estaba ansioso por salir. En su siesta , había soñado con una chica , demasiado morocha para un sueño.

Terminó de ducharse , eligió la camisa que mejor le sentaba después de la dieta que había comenzado tiempo atrás y partió.

La calle estaba desolada , el camino a lo de Gobi no era largo , pero quizás si era peligroso. Nunca tuvo miedo , hoy tampoco. Una nube empezaba a tapar la luna , luna tan llena que impresionaba a lobos. Se estaba formando una tormenta , un rayo y luego un trueno que sonó a lo lejos eran la evidencia perfecta.

En casa de Gobi estaban todos. Faltaba llegar Nico , pero a veces se quedaba en lo de la novia y olvidaba a sus amigos. Cosas de la edad.

Por primera vez en su vida iba a tomar fernet , se sirvió su vaso , con demasiada espuma , tanta que se derramó hasta volcar , lo que presagiaba un mal debut o no.
De las manos de poker sólo en una decidió apostar fuerte , no le fue tan bien , "El peludo" había ligado un poderoso par de jotas , que junto al trío de sietes que estaban en la mesa formaban un hermoso y oportuno full , nada que hacer.

Después de tantas vueltas , la banda de amigos se decidió a encarar para el local balilable de turno. Tuvieron que caminar las veinte cuadras con un diluvio que parecía que "el Barba" hubiese agarrado de punto a toda la ciudad ... Y un frío de cagarse.

Dentro del local , la banda de amigos se disolvió.

Nuestro amigo se vió con ganas de enriquecer su curriculum con hazañas de trasnoche , y a la primer cumbia que pasaron bailó con una chica , no resultó.

Tarde en la noche , en medio de tanta gente , le pareció cruzarse con una mirada que conocía de algún lugar o tiempo. Regresó la mirada velozmente y ahí la vió , demasiado morocha para un sueño. Se acercó a ella y algo hablaron...

No se dió esa noche , será que no existe el amor a primera vista o que la manteca no es para los gatos.

Ya en su casa , todavía de noche pero a poco para amanecer. Se acostó y se durmió ... Volvió a soñar con ella , demasiado morocha para un sueño. Pero esa es otra historia...